En anteriores blogs hemos hablado sobre las verrugas genitales y sus causas, también sobre el tipo de tratamiento a seguir, según cada caso; en esta ocasión toca hablar sobre las consecuencias de tomar decisiones sobre dichas lesiones por nuestras propias manos.
Recuerda que es muy importante siempre acudir a un médico especialista cuando se trate de verrugas genitales por el Virus del Papiloma Humano.
¿Por qué aparecen las verrugas genitales?
Recordemos que las verrugas genitales son causadas por ciertos tipos de VPH, que son virus comunes de transmisión sexual.
Las causas y factores que contribuyen a la aparición de verrugas genitales pueden ser:
- Infección por VPH: las verrugas genitales son causadas por ciertos tipos de VPH, en particular los tipos 6 y 11. Estos virus se transmiten principalmente a través del contacto sexual con una persona infectada.
- Contacto piel a piel: el Virus del Papiloma Humano se transmite principalmente a través del contacto piel a piel, incluso si no hay penetración.
3. Persistencia del virus: en algunos casos, el VPH puede permanecer latente en el cuerpo y luego reactivarse, lo que puede llevar al desarrollo de verrugas genitales en el futuro.
Es importante tener en cuenta que una persona infectada con VPH puede ser asintomática y transmitir el virus sin saberlo. Las verrugas genitales pueden aparecer semanas, meses o incluso años después.
Existen factores de riesgo que pueden aumentar las posibilidades de contraer el virus y, por lo tanto, desarrollar verrugas genitales. Estos incluyen tener múltiples compañeros sexuales, tener relaciones sexuales a una edad temprana, tener un sistema inmunológico debilitado, fumar y padecer otras enfermedades de transmisión sexual.
¿Cómo se tratan las verrugas genitales?
Las verrugas genitales pueden tratarse de diversas maneras, y el enfoque de tratamiento dependerá de factores como el tamaño, la ubicación y la cantidad de verrugas, así como la preferencia del paciente y la recomendación del médico. Puede ser mediante medicamentos tópicos, cirugía o cauterización, inmunoterapia, etc.
Siempre es importante consultar a un doctor para determinar el tratamiento más adecuado en función de tu situación individual, como los especialistas del Instituto Mexicano del Virus del Papiloma Humano.
Definitivamente, la práctica que se debe evitar a toda costa es arrancar una verruga genital, ya que puede llevar a diversas complicaciones como:
- Sangrado y dolor: arrancar una verruga puede provocar sangrado, dolor e irritación en el área afectada. La piel que rodea la verruga también puede resultar dañada y aumentar la probabilidad de infección.
- Infección: puedes introducir gérmenes y bacterias en la herida. Las infecciones en el área genital pueden ser serias y requerir atención médica.
- Recurrencia: existe un riesgo significativo de que vuelva a crecer en el mismo lugar o en áreas cercanas. Esto se debe a que es posible que parte del virus del papiloma humano (VPH) aún esté presente en el tejido.
Diseminación: puedes esparcir el VPH a otras áreas de tu cuerpo, lo que aumenta la posibilidad de tener más verrugas genitales en diferentes sitios.
Un especialista puede determinar el mejor enfoque de tratamiento para eliminar las verrugas genitales de manera segura y efectiva, minimizando complicaciones y recurrencia. Recuerda que los procedimientos médicos realizados por profesionales del IMVPH son la forma más segura y eficaz de tratar las verrugas genitales causadas por el VPH, agenda una cita hoy mismo.